sábado, 28 de abril de 2012

OPEL INSIGNIA SPORTS TOURER OPC 2009 Schuco

El Opel Insignia Sports Tourer OPC se comienza a comercializar en España a la vez que sus hermanos cinco puertas y cuatro puertas, octubre de 2009.  Se puede decir que básicamente estamos delante del mismo producto, sólo que con carrocería familiar. En el artículo anterior ya hablamos de las características del Insignia OPC, por lo tanto en este artículo tan sólo mencionaré las diferencias respecto a las versiones cuatro y cinco puertas y algún que otro detalle o puntualización que no haya sido comentado antes.



La principal diferencia dejando a un lado la clara forma de la carrocería es puramente económica. Si nos decantamos por un Insignia OPC con carrocería familiar debemos pagar más o menos en torno a unos dos mil euros más que si lo hacemos por un cuatro o cinco puertas.

Por supuesto la mecánica es la misma, por lo que estamos delante de una de los pocos familiares deportivos del mercado con motor de gasolina y más de 300 caballos de potencia. Otra diferencia respecto a la berlina y sedán es el tiempo empleado en la aceleración de 0/100 Km/h. Consigue un tiempo de 6,3 segundos, es decir, emplea 0,3 segundos más en conseguir los 100 km/h desde parado. Algo completamente lógico ya que pesa 130 kilogramos más que el sedán y 110 kilogramos más que la berlina. Su peso se sitúa en 1940 kilos.
El consumo de combustible también se ve incrementado en todas las mediciones que normalmente se realizan, que son ciudad, autovía y mixto. El consumo debido al incremento de peso y posiblemente a la aerodinámica se ve afectado en torno a 0,5 litros más que las otras carrocerías.

Debido a la forma de la carrocería la longitud total y altura del vehículo son mayores, 78 mm más largo y 22 mm más alto. La anchura y cota entre vías no se ve incrementada.

En el interior pocas cosas cambian respecto a las otras carrocerías. La iluminación del cuadro de instrumentos al igual que sus hermanos es blanca en el modo Sport o Normal y si pulsamos el botón OPC  se vuelve roja. Monta el mismo volante achatado por abajo y los mismos asientos tipo báquet. El Sports Tourer  se diferencia en que lleva todas las lunas tintadas a excepción de la luna delantera y ventanillas de puertas delanteras. Por supuesto al tratarse del familiar de los tres, es el que más maletero alberga, nada menos que 540 litros, 40 más que el sedán y tan sólo 10 más que la berlina.

Las opciones básicamente son las mismas que en la berlina y sedán, excepto el paquete "Pack Sports Tourer" que incluye red de separación de maletero, redes laterales portaobjetos y rieles "Flex Organizer", este paquete también incluye techo solar panorámico y acristalado tanto para las plazas delanteras como para las traseras. Eso sí, olvídate de tener luces antinieblas delanteras ni en opción para cualquiera de ellos.

LA MINIATURA.

El Sports Tourer OPC también lo ha editado Schuco y convence de la misma manera que lo hace la miniatura que representa el sedán OPC.

En el mercado lo más común es encontrarlo a día de hoy en color Azul Ardenas, que es el color que Schuco editó para su catálogo. Para concesionarios Opel se editó también en este color azul y en color negro, más difícil de encontrar.

Lo que más destaca de la miniatura es sin dudarlo la pintura por su llamativo color azul. El tono es el adecuado pero quizá le falte algo de laca para conseguir un mayor efecto espejo. La miniatura al igual que el modelo 1/1 lleva las ventanillas traseras y luneta térmica tintadas y combina de maravilla con el vistoso color Azul Ardenas.

Todos los pequeños detalles son más perceptibles en este Sports Tourer que en el sedán del anterior artículo debido al color. Se aprecia mejor el sombreado de los faros delanteros, las rejillas y las diferentes partes de las que se compone el paragolpes delantero, como los dientes de tigre. Me he dado cuenta que las branquias laterales del propio paragolpes están a falta de la ranura que hace que pase el aire hacia las ruedas delanteras. Schuco perfectamente podía haberlas realizado con una pequeña línea negra.













Otro detalle que en el color negro no es perceptible es que los espejos retrovisores exteriores traen la mitad superior de las carcasas pintadas en el color de la carrocería y la mitad inferior y los soportes en color negro.

El techo desde un punto de vista caprichoso me hubiese gustado con el tipo panorámico acristalado en negro tintado. La miniatura trae el de serie, el de toda la vida, de chapa, y por supuesto no podían faltar las barras de techo propias de los modelos familiares. Schuco las ha representado con unas piezas independientes de plástico, pintadas en color plata idéntico al de los marcos de ventanas. Al final del techo vemos la antena de tipo tiburón que también es una pieza independiente y pintada en color negro brillante.

La parte trasera es la que más me llama la atención entre otras cosas porque es la parte que más le diferencia de la miniatura sedán. Vemos en la parte más alta el alerón plano con la luz de freno integrada y realizada con pintura roja. El curioso y disimulado pilar C que como en el modelo real viene con una capa de pintura negra en tono mate para que se integre completamente con el tintado de la luneta térmica. Vemos un diminuto y bien realizado limpia luneta trasero y si nos fijamos muy de cerca vemos que el circuito impreso de la la luneta térmica está realizado. De los mejores trabajos que he visto con este tipo de piezas.
Bajo la luneta vemos un embellecedor en tono plata y en el centro el emblema de Opel cromado. En la ópticas predomina el color rojo en el plástico transparente y en general tienen un acabado muy bueno. Los emblemas INSIGNIA y OPC están tampografiados debajo de los faros. En el paragolpes llaman la atención el deflector central, las salidas trapezoidales de escape en los extremos y los catadriópticos realizados con pintura roja.

El interior es idéntico que la miniatura sedan con el mismo fallo en su volante sin achatar por debajo. Se diferencia en la bandeja trasera, tras los asientos. Basicamente es una larga pieza lisa de plástico negro.

Otro familiar de altos vuelos para la colección.








domingo, 15 de abril de 2012

OPEL INSIGNIA OPC 2009 Schuco

El Opel Insignia llega al mercado a finales de 2009 para sustituir a un veterano Opel Vectra. El Opel Vectra tuvo una versión potente y deportiva llamada OPC y como no podía ser menos el nuevo Insignia también tendrá una versión OPC. No es hasta mediados de 2009 cuando llega a los concesionarios con las tres carrocerías existentes, cuatro puertas, cinco puertas y Sports Tourer.
Vamos a centrarnos en las variantes cuatro y cinco puertas. El motor del Insignia OPC es una variante del que monta GM en otros Insignia ó en el ya desaparecido Saab 9-3 Turbo X. Se trata de un motor V6 con turbo y 2.792 cc, veinticuatro válvulas y 325 CV. Su aceleración de 0/100 se sitúa en seis segundos exactos. El incremento de potencia es la gran diferencia respecto a otras variantes de este motor. Para conseguir este incremento en la Potencia se han modificado ciertos parámetros de la centralita, la presión de soplado del turbo es mayor y el sistema de escapes es más ligero y ofrece menos resistencia en su salida. Para controlar toda esta potencia El Insignia OPC monta tracción a las cuatro ruedas con un sistema denominado Haldex que además incorpora diferencial autoblocante para el eje trasero.

Elementos como la suspensión o el sistema de frenos también son diferentes respecto a otros Insignia. La suspensión de dureza variable además de tener un tarado más firme es 25 milímetros más baja. Los grados de dureza son tres diferentes que el conductor puede seleccionar desde el habitáculo. Este tipo de suspensión es independiente en ambos ejes del vehículo.

El sistema de frenos incorpora pinzas de cuatro pistones de la casa Brembo y discos de 355 milímetros para el eje delantero. En el eje trasero equipa también discos, pero esta vez de menor diámetro y las pinzas son firma de la casa GM. Monta de serie llantas de 19 pulgadas y neumáticos 245/40 y de forma opcional puede equipar llantas de 20 pulgadas con neumáticos 255/35.

Exteriormente es muy fácil reconocer cuándo estamos delante de una versión OPC. Sus grandes llantas y el diseño de las mismas lo delatan. Además detalles como las enormes entradas de aire con forma de diente de tigre en el paragolpes delantero, la rejilla de diseño exclusivo , las salidas de escape integradas en el paragolpes trasero y el spoiler en el maletero son únicos en la versión OPC.

El interior también es exclusivo, los asientos delanteros con aspecto Baquets están realizados por el fabricante Recaro, el volante deportivo es plano por su parte más baja, el pomo de cambio tiene un diseño deportivo y el emblema OPC está presente en diferentes partes del habitáculo.

El Opel Insignia OPC celebra diez años desde el nacimiento del primer modelo OPC y además es el OPC más potente hasta la fecha.

LA MINIATURA.

El encargado de representar a la carrocería de cuatro puertas del Insignia OPC es el fabricante alemán Schuco.

Se editó en el año 2009 y lo hizo en color Negro Mica para su catálogo oficial y en color Blanco Alpino y en color Azul Ardenas para concesionarios de la red Opel.

A día de hoy comienzan a escasear las unidades editadas para concesionarios y lo más común es encontrar unidades del color Negro Minca.

Las proporciones de la miniatura son excelentes y el trabajo de pintura es bueno. La unidad de este artículo tiene algo de exceso de pintura justo encima del faro delantero derecho.

En el frontal están presentes  casi todos los detalles de esta versión como las entradas de aire con forma de dientes de tigre con la silueta en tono plata o el trenzado de todas las rejillas es el específico de OPC.  El emblema de Opel cromado contrasta claramente con el tono plata del contorno de la rejilla central. Los faros son increíbles, traen la carcasa en plástico transparente y en el interior podemos contemplar claramente las diferentes partes de las que se compone y el asombroso parecido con el modelo 1/1. No podía faltar la placa de matrícula alemana que en este caso ha sido tampografiada. Un detalle que Schuco a pasado por alto es la realización de las tapas de los eyectores de agua de los faros, que debieran estar presentes en el paragolpes, justo debajo de los faros.


La luna delantera trae todo su contorno incluida la parte del espejo retrovisor interior tintado en negro y en la parte inferior reposan disimuladamente los limpiaparabrisas. 

En el lateral vemos unos intermitentes en las aletas delanteras representados con pintura plata, la misma que se ha empleado para realizar los marcos de ventanillas laterales. En el techo vemos la antena de tipo tiburón que puso de moda en su día BMW. Se trata de una pieza independiente pegada sobre el molde principal. Lo mismo ocurre con las manecillas de las puertas, solo que estas están pintadas en el mismo color que la carrocería.

En la parte trasera vemos una luneta térmica con contorno tintado en negro y están realizados los filamentos de desempaño de dicha luneta. La luz de freno central emplea pintura roja, aunque por el tamaño bien se podía haber empleado plástico tintado en ese color. Los pilotos traseros por supuesto si están realizados de esta forma. Al igual que ocurre en la parte delantera, el emblema de Opel está cromado y el resto de embellecedor que lo acompaña emplea un tono plata, que es como el empleado en el modelo real. En la parte baja del maletero están el resto de emblemas "insignia" y "opc" tampografiados. El paragolpes trasero trae las salidas de escape trapezoidales encastradas en el mismo y un pequeño deflector de aire entre ellas. La placa de matrícula trasera también ha sido tampografiada.

No podemos olvidarnos de las ruedas. Las delanteras traen discos perforados con un tono acerado y por supuesto las pinzas en negro con el emblema Brembo diminutamente tampografiado. En el eje trasero los discos son más pequeños no están perforados y el tono empleado es plata. Las llantas son una preciosidad, compaginan el tono grafito con el color plata de los radios de una forma increíble. En el centro de las mismas está el emblema Opel y las tuercas tampografiadas.

El interior es costoso de apreciar por ser entero negro y emplear un plástico para las ventanillas un tanto opaco. Aún así vemos detalles como la consola central con sus múltiples botones, los relojes con aros cromados o la pantalla del navegador. Por supuesto no podían faltar los asientos delanteros tipo baquets. Un fallo garrafal es no haber incluido el volante achatado por abajo. 

El color más representativo de este modelo es el típico Azul Ardenas, yo lo tengo en negro pero el que más me gusta es el Blanco Alpino, una verdadera joya.