miércoles, 6 de octubre de 2010

FORD SCORPIO II 1994 Minichamps

 
Segunda generación del Ford Scorpio. Se le llamó de todo menos bonito. La reacción del público y la prensa especializada fue un tanto negativa. En Francia lo llamaron "la rana triste". Periodistas británicos lo describieron como el coche más feo de la carretera ó que el Scorpio ojos tristes era tan heroicamente feo que era obvio que fue diseñado por Ray Charles y Stevie Wonder. Ford a día de hoy no ha desvelado el nombre del diseñador y mantiene que el número de unidades vendidas fue mayor de lo esperado.

 Sus rasgos principales son en el frontal los faros, los cuales no guardan ninguna relación con el diseño de la parrilla ni con el diseño de las ópticas del paragolpes. Otro rasgo principal del Scorpio está en la parte trasera con la caida redondeada de la misma y el diseño tan curioso de los faros traseros. A mí personalmente la parte trasera me recuerda a ciertos modelos de coches americanos de los noventa.
El interior del Scorpio nada tiene que ver con el exterior, aquí todo es más normal. Respecto a la anterior generación mejora en comodidad y calidad de acabado.
En el año 1998 recibió un pequeño lavado de cara que afecto a los faros delanteros, estos seguian siendo los mismos pero la tulipa interior era negra. La parrilla delantera también sufrió un casí inapreciable cambio de diseño. En la parte trasera se rediseñaron los pilotos pero su curiosa forma seguiría intacta. Ese mismo año finalizó la fabricación de este controvertido modelo. Dos años más tarde de dicha finalización se vendió la última unidad de Ford Scorpio.

LA MINIATURA.

Miniatura que data de mediados de los noventa, entre 1995 y 1997, cuando las miniaturas de Minichamps traían la caja gris con franjas azules. Minichamps hizo tanto la versión berlina de cuatro puertas como la versión familiar. Ambos en color azul marino. También se puede encontrar aunque con mayor dificultad en color marrón oscuro y en color verde oscuro.

La miniatura la adquirí en abril de 1997, ya por aquel entonces los Minichamps costaban cinco mil de las antiguas pesetas. La calidad con la que se hizo el Scorpio es muy buena para la época. En la pintura no se ven defectos y se muestra brillante. Las ópticas estan realizadas en plástico transparente excepto los intermitentes de las aletas. Se observa alguna rebaba por ejemplo en los antinieblas delanteros y a las luces de marcha atrás les falta intensidad. La miniatura trae todos los emblemas de la marca tampografiados. Incluso en los montantes de las puertas traseras en el pilar C trae las insignias con el nombre del modelo.
Tanto el cromado de la parrilla delantera como el cromado que alberga la línea óptica trasera es brillante y consigue el efecto espejo que merecen este tipo de piezas. Las manillas de las puertas se quedan en el intento de conseguir el tono cromado. La salida de escape también está presente en la miniatura, aunque le falta realizar un agujero en ella.
El interior no llega  a los niveles actuales del fabricante pero en general son buenos. La tapicería es gris y podemos observar que tiene acabado en madera tanto en el salpicadero como en los paneles de las puertas. El espejo retrovisor interior, la palanca de cambios y freno de mano estan presentes. La miniatura tiene techo solar  con un lijero tintado que facilita la visión del interior.

A día de hoy es una miniatura muy fácil de encontrar y a precios realmente bajos. Una miniatura  a la que tengo especial cariño porque es la que encaminó la temática que sigo en la actualidad e hizo que me adentrará en profundidad en el mundo del 1/43.





No hay comentarios:

Publicar un comentario